“Me encontré entonces, en medio de aquel océano de dudas, que tantas noches me habían quitado el sueño, llegando a veces al límite de casi abandonar el proyecto, - le explicaba a Alejandro- quizá lo más difícil de mi carrera… pero también sabía que si salía bien, pasaría a la historia… Llegué a pensar mucho en la gran obra de ingeniería, que sin duda era costosa, pero además sabía que sería el centro de referencia cultural jamás construido… Y lo mejor de todo fue cuando pensé en el nombre que llevaría: Alejandría.
Sí, sin duda, el proyecto era grande y ambicioso, ya que no había
reparado en gastos, por lo que quise que combinara jardines, salas de
tertulias, bibliotecas, laboratorio, siempre
pensando en lugares donde los jóvenes aprendices como tú, pudiesen adquirir conocimientos, referencias,
experiencias… Y lo cierto es que me dije a mí mismo que este sería mi gran
legado… y si el tiempo lo permite, mi hijo Filadelfo seguirá mi sueño…”
Ptolomeo se dirigía entusiasmado junto
al joven Alejandro, que le escuchaba con asombro, hacia las puertas de la
Gran Biblioteca. Por fin iba a mostrarle a su joven aprendiz las obras que ya
casi estaban terminando de aquel glorioso proyecto, lo que durante tanto tiempo
había sido un sueño y había dibujado tantas veces en su cabeza. Ahora, poco a
poco iba tomando cuerpo.
“Alejandro, en esta Biblioteca entrarán obras de Grecia y Persia… de
todos aquellos lugares que los navegantes sean capaces de visitar en sus rutas,
así que no olvides nunca que aquí guardaremos nuestra historia.” - Ptolomeo
suspiró profundamente y abrió la gran puerta.
Basado en la historia de la fundación de
la Antigua Biblioteca de Alejandría,
a comienzos del siglo III a. C. por Ptolomeo.
la Antigua Biblioteca de Alejandría,
a comienzos del siglo III a. C. por Ptolomeo.
Pues este sería uno de los viajes en el tiempo que me gustaría hacer, visitar la biblioteca de Alejandría y conocer a Ptolomeo...
ResponderEliminarYa somos dos Carlos, habría que localizar decididamente al Dr. Who...jijiji
EliminarBonito viaje... Un saludo
ResponderEliminarGracias Antonio, saludos!!
EliminarA mi me ocurre al revez. me quedo con el relato de Sonia. bello, magnífico, soberbio. Posiblemente la realidad nos mostraría otra imagen y no sería tan romántica ni tan agradable. Hay tantas cosas que ocurren detrás de bambalinas que es referible quedarse con la representación de la obra. Gracias Sonia por hacernos vivir algo tan bonito y tan bien expresado. Un solo detalle, perdón, en el anteúltimo párrafo hay una falta de concordancia en las palabras "con asombrado". Es una pena porque lo leido es magnífico. Besos.
Eliminarjajaja... Alberto, el corrector me ha hecho de las suyas... pero ya está, solucionado. Gracias por pasarte, saludos!!
EliminarSaludos, interesante tu relato. Sin duda debe haber sido una majestuosa biblioteca, qué pena que ya no exista, quién no querría conocerla?!. Éxitos!
ResponderEliminarPues sí Mery, sería un gustazo. Me alegra verte por este rinconcito, un saludo!!
EliminarSería increíble que nuestras bibliotecas pudieran parecerse lo más mínimo a la Alejandría, enorme lástima que fuera saqueada y robada en sus tiempos, la cantidad de saber que contendrían aquellos libros y el mimo y esfuerzo que le dedicarían. Muy bonita la historia.
ResponderEliminarSi tienes tiempo, revisa de nuevo el texto ya que hay un par de errores de concordancia, eso en seguido que lo leas lo verás y lo editarás correctamente. Un abrazo Sonia.
Ahora parece que Internet se podría asemejar a una Gran Biblioteca virtual... y es curioso, porque parece que cada vez tenemos más interés en promocionarnos para ser leídos, pero por si las moscas, habrá que guardar copias de seguridad de todo...
Eliminar¡ah!, ya está corregida la errata, gracias por el aviso. -la culpa la tiene el corrector...jeje-.
Saludos Sergio.
Bonita forma de aprender historia. Gracias Sonia :)
ResponderEliminarA que sí, jeje... gracias por la visita Eric, saludos!!
EliminarAy, si pudiéramos mirar por "un ojo retrovisor del pasado", je; yo miraría seguro un rato aquella maravilla que debió ser... Cuánto podemos disfrutar con la Historia, Sonia. A mi, también me encanta.
ResponderEliminarLa verdad es que la actual Alexandrina, tampoco está nada mal. Ya me gustaría tener sólo uno de sus 50.000 libros únicos.
Qué texto tan bonito, de verdad, Sonia. Alejandría..., tiene connotaciones muy especiales para mí.
Saludos!
Gracias Clarisa, me alegra que te interese el tema que elegí para el micrirrelato y que además te guste, saludos!!
EliminarMuy buen relato, cómo me hubiera gustado conocer esa biblioteca, quizás para cuando construya mi máquina del tiempo...
ResponderEliminarSaludos
Felipe, entonces habrá cola para ir, jeje. Saludos!!
EliminarHistorias bellamente narradas sobre la historia, con sensibilidad, que transportan y nos presentan los lugares y los tiempos, lor personajes que son personas y todos aquellos sucesos maravillosos que forman parte de nuestras vidas, porque son nuestros cimientos..Qué bien lo haces Sonia..Ideal esta simbiosis..!! Saludos
ResponderEliminarGracias Alfmega, me alegra que te guste, un saludo!!
EliminarDesde que vi la peli de Hipatia ese tema me fascina.Un abrazo
ResponderEliminarNo la he visto, pero tomo nota Isabel, un saludo.
EliminarHola Sonia, un viaje en el tiempo muy interesante ;) visitar ese gran sueño que creó Alejamdro tiene que ser realmente espectacular. Me encantaría. Un post muy divulgativo
ResponderEliminarBesos ;))
Me alegro de que te guste Gema, un saludo.
Eliminar