Erase una vez, en una tierra no
muy lejana, donde los caballeros trinchan molinos de viento en las mesetas más
castizas, habitaban siete enanitos acostumbrados al trabajo en el campo solariego
y tan cucos eran ellos, que hasta cantando le pedían al cielo por sus cosechas,
creyendo que con eso el cielo se iluminaría y caerían gotas de agua como monedas
de euro en mitad de aquella sequía...
Tal era la osadía de estos siete
enanos, que quisieron buscarse un mecenas que les hiciera pago por adelantado
de lo que aun no habían cultivado y así, Sabio empezó a pensar como usarían tal
inversión en estas tierras tan secas mientras que Gruñón disentía y se negaba a
cambiar de rutina. Para disimular la tensión, Tímido cantaba enrojecido a lo
bajito mientras Mocoso estornudaba tan fuerte que esparcía las semillas sobre
la tierra al tiempo que Mudito los observaba tiernamente mientras que Bonachón
no paraba de reírse de aquel “desastre” bueno y Dormilón, que había dejado su
azada, ya se echaba la acostumbrada siesta.
Y llegó en una mañana el ansiado
mecenas en forma de Blancanieves, que les prometió muchos y muy buenos remedios
y les hizo creer que cuidaría de todos ellos, así que los enanitos se lo
creyeron y en sus vidas la metieron… y pobre de ellos, que esta Blancanieves
tan engatusados los tenía, que en realidad no veían que la popularidad que
había alcanzado la cambiaría sin pretenderlo, pues a oídos de su madrastra llegó
la noticia de donde vivía… ¡en mitad del campo nada menos! y como la envidia
corroe el corazón, quiso hechizarla haciéndole comer una manzana maldita que Blancanieves
degustó como manjar de reyes en su paraíso meseteño, más la pobre quedó condenada
de por vida a un cambio radical de imagen, pues algo raro pasó con el
sortilegio de la bruja de su madrasta, que no hubo nunca un príncipe azul que
sintiera ganas ni tentación de besar a tan gentil dama que terminó dejando en paro
a los enanitos por su desgracia y todos quedaron inmortalizados en ninots de
fallas valencianas del disgusto que se llevaron.
Y colorín colorado, este cuento
fue olvidado.
NOTA: Basado en el
Cuento Clásico de Blancanieves y los Siete Enanitos, pero inspirado en los ninots de una falla del barrio de Ayora de Valencia del 2015 que además os traigo en fotografías más abajo.
Este texto ha sido elaborado
para el concurso de
cuyo motivo es
jeje, curiosa versión del cuento de los enanitos de blancanieves. Es una versión realista y actualizada de como es la gente hoy en dia, lo has clavado !!! la pena que esos ninots, esperan ser indultados para seguir su vida anterior. Yo les indultaría !!! Fantástico Sonia...
ResponderEliminarJajaja ay Carlos, todos fueron quemados el pasado 19... ni Blancanieves-Rajoy ni los enanitos fueron indultados.
EliminarUn saludo!!
Pobres enanitos, no sabían a quien metían en su casa. Una cara bonita puede traer la más traicionera de las suertes. Un abrazo.
ResponderEliminarAy María, uno se hace esclavo de sus palabras y esta Blancanieves prometió y no cumplió. Gracias por pasarte, un saludo!!
EliminarCuriosa Blancanieves que acabó dejando a los enanitos en el paro...menos mal que siempre hay una madrastra a la que culpar... Qué vuelta de tuerca al cuento!! Me gustó.
ResponderEliminarMuchas gracias Isabel, me alegro, un saludo!!
Eliminarjajajajaja, muy divertida tu versión más teniendo en cuenta la situación española! Me ha encantado Sonia. Está padrísimo! Un abrazo muy fuerte
ResponderEliminarMuchas gracias Ana, me alegro, aunque trasladar la situación española se me ha hecho durillo, pero bueno, por eso puse en qué me había inspirado. Ese Rajoy satirizado lo pedía a gritos... 😉 Saludos!!
EliminarMe encanta que hayas españolizado a los enanitos y encumbrados al arte valenciano.
ResponderEliminarMuy divertida versión.
Un saludo
Y tan españolizados Yolanda, les he dado vuelta y vuelta por la meseta manchega y al final han terminado en rebozados por la costa mediterránea entre fallas... Gracias por pasarte, un saludo!!
EliminarSaludos Sonia, muy entretenida narración y una versión muy creativa y mostrando una dura actualidad. Éxitos y bendiciones!
ResponderEliminarAsí es Mery, gracias por pasarte, un saludo!!
EliminarJoooo !!!! que triste final !!!! menudo viraje le has dado, hay que ver el rumbo tan diferente y original que puede dar la historia de este cuento.
ResponderEliminarBesos y abrazos.
Saludos
jajaja.... hay muchas versiones, este cuento se las trae... Besos!!
EliminarJajajaj, pero bueno, y el príncipe qué?? Ay por favor, por unos pelillos de nada mira la que se ha liao!! Bueno, niña, qué pasa con tu ingenio?? dónde acaba??.besotes Sonia.!!!
ResponderEliminarjajaja... es que esta Blancanieves tiene cara de "Mariano"... ;D
EliminarCrítica mordaz utilizando de base el cuento de Blancanieves. Muy bueno el párrafo de los nombres, me encantó.
ResponderEliminarUn saludo, Sonia.
Muchas gracias Ricardo, la idea me la proporcionó la sátira representada por el ninot. Un saludo!!
EliminarHola Sonia ;) vayaaaa jajjajjajajj mi falla favorita o la que más me llamó la atención fue la de los cuentos populares, pero la que salen los tres cerditos, pinocho, y la camita porque es de noche y es hora de contar un cuento... para no perder la tradición.....
ResponderEliminarPero esta Blancanieves de cara bonita nada de nada, tal vez llevara una buena máscara, donde la muy tonta se pensaba que se iba a salir con la suya con esos fantásticos emprendedores de los enanitos.... y tan solo es una marianoeta jejejjejeej de otros que la manejan desde arriba... aixx..... que ni los príncipes la quieren.... ambición nos arrastra a todossss, incluidos los currelas de los enanitos ;(( Me ha gustado el visualizar este cuento en modo de realidad y actualidad.....
pd. me hadado más espeluzno esta blancanieves que los petardos.....jejejejejjejejejjeje
besossss
jajajaja... dímelo a mí, que yo la vi en directo.... ;D
EliminarSaludos!!
jjj...Chulo el giro que le has dado a la historia, sátira tan buena como lo son las fallas.
ResponderEliminarun abrazo¡¡
Muchas gracias Clara, me alegro de que te gusten las dos, un saludo!!
EliminarEstupendo el relato, y las imágenes preciosas.
ResponderEliminarMuchas gracias Mercedes, un saludo!!
EliminarCuriosa y original transformación la que le has dado al cuento, Sonia! Me ha encantado cómo ubicas la historia para encontrarle después un final en las fiestas valencianas. Muy imaginativo, a mí nunca se me ubiera ocurrido algo así :)
ResponderEliminarUn abrazo!!
jajaja... gracias Julia, será que me han impactado mucho y las veo hasta en la sopa... ;D
EliminarUn saludo!!
Muy buena combinación, Sonia entre el clásico y la actualidad. ¡Buen cuento, Sonia!
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Federico, un saludo!!
EliminarMuy bueno Sonia, y tienes razón, "ni príncipe ni princesa, osarían besar tan horrenda jeta"
ResponderEliminarUn abrazo
jajaja.... gracias María por pasarte, un saludo!!
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